Un mensaje lindísimo que nos comparte José Ángel, que nos hace reflexionar y que representa un excelente recordatorio para esos días de estrés o agotamiento.
«Limpio el patio para que al día siguiente esté lleno de hojas, pero agradezco la sombra del árbol. Lavo los platos para que dentro de unos momentos el fregadero deje de estar vacío, pero doy gracias por la comida. La rutina me agota, pero doy gracias por estar vivo cada día. Nada es gratis, pero tampoco nada es sin propósito. Las responsabilidades siempre están ligadas a al menos una bendición.»
Rachel Carvalho
RECETAS A PRUEBA DE ERROR 